Posted On January 12, 2018 By In Académico And 1080 Views

El baile del corazón – Crónica de una presentación de ballet

Noviembre 16 de 2017. En el primer día todo era nuevo, llegamos al teatro y todas estábamos muy emocionadas, para muchas era la primera vez que hacíamos parte de una presentación de ballet, este día mi hermana me venía a ver y estaba un poco nerviosa. Por suerte tuvimos la oportunidad de ensayar un poco antes de presentarnos, esto nos dio más confianza, además de ver a las otras niñas practicar. Todo iba bien hasta que extravié mi celular y entre en pánico, quería que todo estuviera perfecto, pero la angustia no me dejaba disfrutar el momento y no quería salir al escenario así de preocupada. Después de mucho lo encontré y pude salir a presentarme y darlo todo, nos fue súper bien y lo disfrutamos un montón.

Noviembre 17 de 2017. En el segundo día de función ya no predominaban los nervios, solo era disfrutar. Este día no pudimos ensayar, por lo tanto pasamos mucho tiempo juntas y cada día forjábamos lazos de amistad más fuertes, era lindo sentir que tenías amigas que están ahí para apoyarte en estos momentos que significan tanto para uno. Llego la hora de pasar y a pesar de que ya le teníamos más confianza al escenario, no fue de las mejores funciones que tuvimos, el sonido, la escenografía y nosotras mismas tuvimos problemas a la hora de presentarnos, pero esto no nos desmotivo, lo que hizo fue hacernos caer en cuenta que debíamos ser mejor el siguiente día.

Noviembre 18 de 2017. En el tercer día ya no era algo que no supiéramos hacer, ya habíamos adquirido experiencia y daríamos lo máximo que pudiéramos para conquistar al público una vez más. Ensayamos y recibimos inspiración y apoyo por parte de nuestra profesora. Al presentarnos la energía del público era indescriptible, no habíamos ni empezado y ya nos estaban aplaudiendo, todo nos motivaba a hacerlo mejor que el anterior día y así fue, todo salió hermoso.

Noviembre 19 de 2017. En el cuarto día, la emoción por ser el último día se sentía pero había nostalgia por el fin de la temporada. Este era uno de los días más importantes, era el día en el que la familia estaba allá para verte, para concluir un año más, el día en el que ya todos estábamos más cerca que nunca, este día había que aprovecharlo porque en este día se daría fin a Pinocho y el Hada Azul. Pudimos ensayar y la presentación salió mejor de lo que esperábamos. Al final, cerramos la temporada con mucha felicidad.

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